¡Lo que nos ha costado este lunes!, creo que ha sido de los más duros hasta la fecha, necesito seguir recuperando horas de sueño porque vamos.. más vago imposible. Y hoy para animarnos volvemos al medio invierno, aquí es Asturias han descendido las temperaturas muchísimo y hasta estaban dando nieve a 500m creo… Vamos un desastre, a este paso el moreno lo vamos a tener que posponer hasta junio y ¡no puede ser!. Pero al mal tiempo buena cara, y nada mejor que empezar el día con un desayuno bien rico que nos levante el ánimo. Últimamente no puedo vivir sin los crepes, tortitas o similar, se están convirtiendo en un básico en mi vida. Aunque siempre intentamos buscar la opción más sana para no abusar de las harinas refinadas, que con los marroquíes ya nos llega. Así que hoy optamos por otra harina y como siempre una bebida vegetal. ¿Queréis saber más de esta receta?.
Ingredientes para unos 4/5 crepes (dependiendo de la sartén):
- 1 Huevo
- 80 ml de leche de soja (podéis usar cualquier otra vegetal).
- 3 Cucharadas rasas soperas de harina de espelta.
- Yo le añado un poquito de esencia de vainilla (opcional).
La preparación es super sencilla como siempre vamos. Mezclamos todos los ingredientes con la batidora (o si preferís a mano pues a mano), una vez tengamos una masa homogénea vamos al siguiente paso. Buscamos una sartén que sepamos que no se va a pegar, no os fiéis de las más nuevas porque a mi es con la que más se me pega y más masa pierdo. Engrasamos con una servilleta y aceite de oliva/girasol/coco lo que queramos. Cuando esté caliente vertemos un poco de la mezcla, lo justo para que cubra el fondo de la sartén y que no nos queden muy gordos. Esperamos a que se haga por abajo y con ayuda de un cuchillo, tenedor o paleta levantamos un borde para darles la vuelta. Y así uno detrás de otro. Luego los podéis acompañar con la fruta que más os guste, siropes o chocolate. Yo he optado esta vez por la mantequilla de cacahuete y las fresas.
¡Feliz martes!