Las semana pasada fue el momento elegido para ponerme en manos del equipo del Salón Duarte. Os adelantaba por Instagram unas breves líneas de lo que había ido a hacer a este oásis para el cabello y el cuero cabelludo en la ciudad de Oviedo.
El salón Duarte es mucho más que una simple peluquería, es un instituto del cabello. ¿Y estó que quiere decir? Qué son especialistas en el cabello y el cuero cabelludo, donde primero realizan un diagnóstico sobre los posibles problemas de nuestro cabello y enfermedades de nuestro cuero cabelludo y después realizan los tratamientos adecuados para cada causa. Y ya sabéis que para estar bien por fuera, primero tenemos que cuidarnos por dentro. ¡Y eso hemos hecho en esta primera cita!
Hacía unas semanas había hablado con Eva, la dueña del salón, sobre los problemas que venía sintiendo en los últimos meses en mi cuero cabelludo. Ya sabéis que el “alisado de Keratina” me había dado mucha caspa y picores. Así que fijamos una cita para empezar a trabajar en este problema y devolverle toda la vida a mi cabello.
En el Salón Duarte
Llegamos al Salón Duarte, ubicado en la Calle Uría 16, en el centro de la ciudad, nos recibe Sandra, una de las chicas del equipo Duarte. La música suave envuelve el salón, y justo detrás nuestra llega Eva.
Tras un diagnóstico de mi cabello y cuero cabelludo, Eva resuelve cuales son los principales problemas que tengo, y cómo vamos a empezar a tratarlos a través de tratamientos.
Mi cuero cabelludo en este momento se encuentra deshidratado, muy cargado de piel muerta, y con algún brote de caspa. Lo que hace que, uno tenga picores, y dos, que el pelo se quede más pegado al cuero cabelludo afectando al volumen. Mi cabello también ha vivido momentos mejores, las decoloraciones y las herramientas de calor no han ayudado, y los medios y puntas estaban bastante secas.
Tratamiento de hidratación personalizado de Leonor Greyl
Mi tratatamiento comienza con la aplicación de un aceite de la marca Leonor Greyl. Este aceite se aplica con el cabello en seco de medios a puntas, y después en el cuero cabelludo gota a gota. Estas gotitas deben frotarse bien en el cuero cabelludo para así hacer una especie de peeling y eliminar las células muertas. Debemos cepillar el pelo con un cepillo de cerdas naturales para distribuir bien el aceite por todo el cabello.
El segundo paso consiste en poner Crème aux fleurs, una crema lavante y suavizaste muy hidratante, más un barro de lago de agua dulce, que también hidrata en profundidad a la vez que nos aporta vitaminas y minerales al cuero cabelludo.
Esta mezcla se pone en medios y puntas, y después en el cuero cabelludo. Para ayudar a que penetre correctamente en el cuero cabelludo se utiliza vapor, durante unos 15 minutos. Una vez pasado el tiempo, se pasa a lavar, pero no es un lavado al uso, con ayuda del agua se va emulsionando la crema y a través de un masaje vamos limpiando el cabello y el cuero cabelludo.
El tercer punto sería reacondicionar el cuero cabelludo con un tónico de la marca. Este tónico es un cóctel de vitaminas, minerales y oligoelementos.
Cupping con ventosa de cristal
Una vez terminado el tratamiento con los productos de Leonor Greyl, continuamos mimando el cuero cabelludo. Es el momento de proceder con el cupping, a través de una ventosa de cristal succionamos levemente el cuero cabelludo, gracias a esta acción la sangre sube a nuestro cuero cabelludo y estaremos activando la circulación sanguínea de la zona.
¿El beneficio que obtenemos? Aumento de la oxigenación del cuero cabelludo, asegurándonos de que llegue a los folículos los nutrientes necesarios. De este modo conseguimos un cabello más fuerte y sano, y un menor riesgo de caída.
Masaje y corte para sanear
El final de este tratamiento personalizado acaba con un masaje capilar estimulante que de nuevo ayuda a la oxigenación del cuero cabelludo a la vez que lo relaja y suaviza.
Por último, un corte de puntas para sanear la “melena” y que luzca lo más sana posible. Después de esto, la sensación de ligeraza en el cabello, y de frescor en el cuero cabelludo es francamente notable. Sientes una sensación nunca antes vivida. El cuero cabelludo se nota limpio y suelto.
En casa
El problema no acaba aquí, ahora es el momento de continuar con este régimen de tratamiento personalizado en casa. Una vez a la semana deberé aplicarme un tratamiento similar al realizado en el Salón Duarte en casa. Cada tres semanas debo volver a realizarlo al salón para ver como evoluciona mi cuero cabelludo, y utilizar herramientas que en casa son inviables como el proceso con vapor.
¿Y tú también quieres visitar el Salón Duarte
Como siempre os digo con este tipo de tratamientos, lo que funciona para mí quizás no funcione para ti. De ahí la importancia de ponerse en manos de un profesional que sepa diagnosticar nuestros problemas, ver nuestras necesidades y sepa crear un tratamiento personalizado para cada caso.
Yo ya tengo mi nueva rutina capilar personalizada con la que trataremos y mejoraremos mi salud capilar. Si tu también quieres la tuya ya estás tardando en llamar al Salón Duarte, ellas sabrán asesorarte para lograr tus objetivos capilares.
¡Feliz miércoles!
