¡Buenos días soleados! Parece que hoy vamos a poder disfrutar de otro intenso día de playa. Desde bien temprano hace un solazo impresionante. Así que solo nos queda acabar con los quehaceres diarios, preparar la comida e irnos pronto a aprovechar el día de sol. La receta de hoy es un nuevo smoothie con aloe vera y fresas, que justamente me estoy tomando mientras escribo este post. Ayer conseguimos un poco de aloe vera en la playa, y al llegar a casa busqué alguna receta que me pudiera gustar para incorporar este nuevo ingrediente. Había oído hablar sobre el aloe vera y sus propiedades como «alimento», así que hoy nada más levantarme quise probarlo en smoothie.
El aloe vera tiene entre otros, los siguientes beneficios:
- Desintoxica y alcaliniza nuestro cuerpo.
- Hidrata la piel.
- Reduce el extrés.
- Mejora el sistema inmunológico.
- Disminuye el colesterol y la presión arterial.
- Ayuda a la digestión y en problemas gástricos.
- Es una fuente de vitaminas, minerales, aminoácidos y ácidos grasos.
El aloe vera lo podemos tomar en zumos, shots o smoothies. Yo para mi smoothie he elegido que llevara fresas por si no me gustaba mucho su sabor. Este en concreto es muy sencillo y lleva muy pocos ingredientes. Vamos a necesitar:
- 1/4 de taza de gel de aloe fresco.
- 1/2 taza de fresas congeladas.
- 1 taza de agua
- 1 cucharada de zumo de limón o lima.
Lo primero es sacar el gel del aloe vera. Primero le quitaremos las espinas de ambos lados. Después cortamos la penca por la mitad dejando expuesta la pulpa y la podéis sacar bien con un cuchillo o una cuchara raspando la otra parte de la corteza o cortándola. Ponemos todo en el vaso de la batidora y licuamos bien hasta que tengamos una mezcla homogénea y sin tropezones. Después está listo para servir y disfrutar de un smoothie fresco y sano.
¿Qué os parece esta idea? ¿Habéis probado el aloe vera como alimento?